sábado, 22 de noviembre de 2008

El Saber


El saber significa, pues, sufrimiento, en una primera instan­cia. Como ejemplo, una carta que Descartes le envió el 6 de octubre de 1645 a Cristina de Suecia. El filósofo le en­seña a la cabeza coronada que el aumento del saber implica también aumento de la tristeza, del dolor y de la melancolía. Escribe: "Confieso que es mejor ser menos alegre y tener más conocimiento".

El saber es la conciencia, y la con­ciencia siempre está dirigida a un objeto. Pero al parecer, todo converge hacia lo trágico, que se suele definir como lo que caracteriza la necesidad, lo que es imposible que no ocurra y obliga a cada uno a obedecer fuerzas que lo superan. En efec­to, saber es, en primer lugar, tomar conciencia de que uno es­tá inscripto en el tiempo, y debe soportar sus efectos: dolores y sufrimientos, duelos y melancolías, tristezas y desdichas. Por­que pasa el tiempo, muere el cuerpo; porque los días transcu­rren, triunfa la muerte; porque la entropía funciona de manera ineludible, todo se gasta, incluso el desgaste. Un saber que ig­norara estas evidencias no sería saber. Y hay que partir de ésta: tenemos que morir. Dominados por esa sombra siniestra, ¿en qué consiste la felicidad? ¿Cómo se puede ser feliz si es inevi­table marchar hacia la muerte y la nada?




La primera tentación es creer que hay que restaurar la ino­cencia: saber lo menos posible para sufrir lo menos posible. Pe­ro para este proyecto funesto, habría que cultivar la ignorancia, y esto ya supone saber demasiado, porque saber que se debe proceder de ese modo, es entrar ya en el pensamiento trágico. La felicidad residiría en el no-saber. Ni siquiera en el saber so­crático, porque saber que no se sabe nada, es ya saber mucho.

Michael Onfray

3 comentarios:

Bayo dijo...

Hola:

(Te escribo en esta entrada porque no encontré ningún email directo).

En primer lugar, te cuento que me encantó tu blog y que ya lo agregue en los "vínculos interesantes" del mío.

En segundo lugar, te felicito por el nombre que elegiste para tu blog, ya que para mi, ISAAC ASIMOV es DIOS. Es lo máximo. Estoy exagerando, pero cada vez que leo un libro suyo quedo demasiado satisfecho.

Por último, como me parece que somos amantes del "pensar", considero que también te gustará mi blog. En él, recopilo todo el material que considero que hace pensar (fragmentos de libros, de películas, reflexiones, frases, anuncios publicitarios, etc.). Espero que puedas verlo.

Saludos,

Bayo

http://serpensador.blogspot.com

Anónimo dijo...

excelente texto y excelente pagina--- paso siempre desde hacer mucho tiempo... no le aflojes amigo que de eso se trata la vida.
Gracias por la dedicacion y el constante transmitir..

paz, amor, libertad y empatia...

luck

asimov dijo...

Gracias a ambos por vuestros comentarios.-

salu2.