lunes, 14 de enero de 2008

Simplemente historia

". . . la del Santo Oficio, la del Índice de los Libros Prohibidos; la de las Cruzadas y la noche de San Bartolomé; la que saqueó a Constantinopla y bañó de sangre a Jerusalén; la que exterminó a los albigenses y a los veinte mil habitantes de Beziers; la que arrasó con las culturas indígenas de América; la que quemó a Segarelli en Parma, Juan Hus en Constanza y a Giordano Bruno en Roma; la detractora de la ciencia, la enemiga de la verdad, la adulteradora de la Historia; la perseguidora de judíos, la encendedora de hogueras, la quemadora de herejes y brujas; la estafadora de viudas, la cazadora de herencias, la vendedora de indulgencias; la que inventó a Cristoloco el rabioso y a Pedropiedra el estulto; la que promete el reino soso de los cielos y amenaza con el fuego eterno del infierno; la que amordaza la palabra y aherroja la libertad del alma; la que reprime a las demás religiones donde manda y exige libertad de culto donde no manda; la que nunca ha querido a los animales ni les ha tenido compasión;



la oscurantista, la impostora, la difamadora, la calumniadora, la reprimida, la represora, la mirona, la fisgona, la contumaz; la relapsa, la corrupta, la hipócrita, la parásita, la zángana; la antisemita, la esclavista, la homofóbica, la misógina, la carnívora, la carnicera, la limosnera, la tartufa, la mentirosa, la insidiosa, la traidora, la despojadora, la ladrona, la manipuladora, la depredadora, la opresora; la pérfida, la falaz, la rapaz, la felona; la aberrante, la incosecuente, la incoherente, la absurda; la cretina, la estulta, la imbécil, la estúpida; la travestida, la mamarracha, la maricona; la autocrática, la despótica, la tiránica; la católica, la apostólica, la romana; la jesuítica, la dominica, la del Opus Dei; la concubina de Constantino, de Justiniano, de Carlomagno; la solapadora de Mussolini y de Hitler; . . . "


Extraído del libro: La Puta de Babilonia, de Fernando Vallejo.-

Simplemente historia. . .

1 comentario:

Anónimo dijo...

leyendo constantinopla, de isaac asimov, me di cuenta que mucho de la doctrina cristiana, en especial esas reacciones fanaticas, vienem de la idolatria de los griegas y persas que se coló en bizancio y que obedece a planes o politicas de gobierno y poder de los monasterios mas que al corazon de la religion. cada vez creo menos en la iglesia y más en la acción de la providencia directamente en nuestras vidas.
uy uy, como nos han manejado toodo este tiempo.
erkebrand2001@hotmail.com