miércoles, 11 de febrero de 2009

Darwin: 200 años.

"Tampoco podemos pasar por alto la probabilidad de que la inculcación constante de una creencia en Dios en la mente de los niños produzca un efecto tan fuerte, y quizás heredado, en sus cerebros no totalmente desarrollados, que les resulte tan difícil librarse de su creencia en Dios, como a un mono de su miedo y aversión instintivos a una serpiente"




Charles Darwin

Nos adoctrinan desde pequeñitos, cuando el cerebro aún está "tierno" para que no se nos olviden las tonterías e idioteces, los miedos y penas, en definitiva "el alienamiento religioso"...

1 comentario:

Bayo dijo...

Hola:

¡Maravillosa reflexión de Darwin!

Sin embargo, me llama profundamente la atención que, siendo una reflexión tan lógica, sea tan poco real para el 90% de la población (por decir alguna cifra). Bueno, también es lógico que la mayoría de las personas adultas no puedan desechar de sus cerebros lo que les hicieron creer desde muy pequeños y no puedan buscar la verdad por si mismos.

Saludos.

bayo